
Se inicia una nueva sección en este blog, en la cual os iré contando mis experiencias en otras tierras, algunas relacionadas con el mundo del running (como lo fue el viaje a Amsterdam, el cual fue realmente el inicio de este nuevo apartado del blog) y otras no.
En esta ocasión, aprovechando unas merecidas vacaciones en el trabajo, París se convirtió en el destino. La estancia no fue demasiado larga (desde el jueves a mediodía hasta el domingo por la mañana) pero si muy intensa, pues hubo tiempo para recorrer los lugares fundamentales de la ciudad.
El jueves aprovechamos para pasear, después de pasar rápidamente por el hotel para dejar las maletas. La Ópera, Tullerías, Plaza Vendome, la Madeleine, alrededores del Louvre, Plaza de la Concordia, Campos Elíseos, Arco del Triunfo(impresionantes vistas)...
Nos empapamos del ambiente parisino, encontrándonos con una ciudad cosmopolita, en la cual tan pronto te encontrabas con franceses como con españoles, alemanes, nórdicos, indúes... y no sólo en los lugares turísticos de la ciudad. Finalizamos el día con una merecida cena en un tranquilo restaurante italiano del barrio en el que estaba nuestro hotel. Por cierto, el hotel, aunque no estaba en el centro, tenía una muy buena ubicación, con Metro casi en la puerta, varios restaurantes, brasseries y tiendas de todo tipo en la misma calle.

El viernes fue el día de los museos, con una visita matinal al Museo d´Orsay, joya del arte del siglo XIX y principios del XX, en especial del impresionismo y postimpresionismo (Degás, Renoir, Van Gogh, Monet...) y al Museo Rodin, ubicado en la antigua casa del escultor, donde pudimos ver la mayor parte de su obra (El Beso, El Pensador, Las Puertas del Infierno...) y pasear por sus jardines. Por la tarde, maratoniana (no podía ser de otra manera) visita al Louvre, un museo que no se puede conocer en un solo día, pues el volumen de obras que posee es brutal, así como su valor artístico y por abarcar obras de épocas muy diversas.Acabamos el día con un paseo en barco por el Sena.


El sábado por la mañana visitamos la "ille de la cité", isla del Sena en la que se ubican la Santa Capilla y Notre Dame, las cuales no dejamos de visitar. Un breve paseo por el barrio de Saint Germain, nos llevó hasta la Sorbona y el Panteón (lugar donde descansan los restos de personajes de la talla de Victor Hugo, Zola o Alejandro Dumas).

Por la tarde, volvimos sobre nuestros pasos para acercarnos al Museo de arte contemporáneo Georges Pompidou y dar un paseo por el barrio de Les Halles y la Plaza de la Bastilla. Después, un paseíto en Metro hasta Montmarte, donde disfrutamos de las vistas de Paris desde el Sagrado Corazón y conocimos el ambiente del barrio bohemio de la ciudad.

Otro paseo en Metro nos llevó a la Plaza de Trocadero, junto a la Torre Eiffel, a la cual nos dispusimos a subir tras las pertinentes compras de souvenirs y un rato de relax en el campo de Marte. El espectáculo que se puede disfrutar desde lo más alto de la Torre es impresionante, sobre todo de noche, con los grandes monumentos de la ciudad iluminados, incluída la propia obra de Gustav Eiffel.

Para finalizar, un paseo hasta los Campos Elíseos para cenar y volver al hotel, pensando ya en el madrugón del día siguiente para tomar el vuelo de regreso a casa.
Próximo destino: Estocolmo.